El camino de Independiente al título
Por algo es el «Rey de Copas». Fue un camino muy largo que inició en abril y terminó en diciembre. Nueve meses llenos de partidos vibrantes y emocionantes que marcaron el camino de Independiente al título. La primera llave se dio justamente ante ante el actual campeón nacional: Alianza Lima. En un partido que lo dominó claramente, el cuadro argentino no pudo pasar del empate ante el cuadro blanquiazul en el Libertadores de América, siendo el único partido en toda la competencia que no ganó como local.
Sin embargo, en el duelo de vuelta la historia sería distintas, y con tanto de Emiliano Rigoni los dirigidos por Ariel Holan lograrían el pase a la siguiente fase, aunque sin una idea que convezca. Ya en la siguiente fase se toparía con el cuadro chileno de Deportivo Iquique, a quien doblegarían en ambos partidos y sellaría la llave con un marcador global de 6-3 en lo que sería el último partido de Rigoni en el «Rojo», pues partiría al Zenit de Rusia.
Ya entre los 16 mejores, se enfrentarían ante el único equipo argentino que verían en todo el torneo: Atlético Tucumán. En el duelo de ida cayeron por la mínima diferencia como visitantes, sin embargo, lograron revertir la situación en el duelo de vuelta, y con tantos de Fernández y Benítez sobre el final se metieron entre los ocho. Ahí los esperaría el Nacional de Asunción, con quien no tendría mayores problemas, pues en Argentina vencieron 4-1 y en Paraguay 2-1.
En semifinales los esperaba otro equipo paraguayo con quien protagonizaron una de las series más reñida de toda la campaña: Libertad. En Asunción, el cuadro guaraní logró imponerse con tanto de Óscar Cardozo en la primera jugada del partido. Pero, tal como se venía haciendo costumbre, con el apoyo de toda su hinchada en Avellaneda, los «Diablos Rojos» lograron en los primeros 45 minutos sentenciar la llave con un dos tantos de Gigliotti y uno de Barco.
Así, llegaban a la final para protagonizar el clásico de sudamérica: Argentina vs Brasil, pero representados por Independiente y Flamengo. Los argentinos abrieron la llave como locales, y, nuevamente, con goles de Gigliotti y Meza lograron darle vuelta a un partido que empezaron perdiendo, y así se fueron a Río de Janeiro, con la ventaja de 2-1 a favor. Frente a un Maracaná que colapsaba por la cantidad de hinchas, el «Mengao» se pondría adelante con tanto de Paqueta, sin embargo, sobre el final del primer tiempo, Ezequiel Barco, un «pibe» de 18 años tuvo el coraje de poner el balón en el punto de penal para decretar el 1-1, marcador que no se movería más y consagraría a Independiente como campeón.
De esta forma, el cuadro de Avellaneda sumó su segunda Copa Sudamericana y la pondrá al lado de esas siete Copa Libertadores que llenan una de las vitrinas más envidiadas de todo Sudamérica y que dejan muy en claro porque es el «Rey de Copas».