Barcelona: así jugó Lionel Messi en la emocionante victoria en la Copa del Rey

Luis A. Gonzales C.

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Entre los escándalos extradeportivos y la posible salida de Lionel Messi, Barcelona dio ayer una demostración de rebeldía en la Copa del Rey. El cuadro blaugrana logró una emotiva victoria ante Granada con un Messi figura y muy participativo para clasificar a las semifinales. El crack argentino ayudó al equipo de Ronald Koeman a remontar dos goles en contra para terminar goleando y en GOLPERU analizamos las claves del partido.

Barcelona venció por 5-3 a Granada en los cuartos de final de la Copa del Rey, en un encuentro que tuvo tres goles en el segundo tiempo y cuatro más en el tiempo extra. El conjunto catalán se vio con un 2-0 en contra en el comienzo del complemento cuando dominaba el juego indiscutiblemente. Con algunos errores en defensa, Koeman mandó su mejor once del momento al campo del estadio Los Cármenes.

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El holandés alineó con Marc-André Ter Stegen en portería, dejando en la banca al habitual titular en la Copa del Rey, Neto. El 1-4-3-3 fue el esquema inicial del Barcelona, con Ronald Araújo y Samuel Umtiti como defensores centrales. Jordi Alba y Sergio Roberto fueron los laterales para aprovechar su vocación ofensiva. Sergio Busquets inició en la base con Pedri por izquierda y Frenkie de Jong por derecha. Lionel Messi adelante estuvo acompañado por Antoine Griezmann y Trincao.

En los costados, se formaron parejas para desquilibrar y buscar el 2 vs. 1. Trincao y Sergi Roberto por un costado, Griezmann y Jordi Alba por el otro. Busquets, Pedri y de Jong formaron un triángulo en el mediocampo para circular el balón, cercanos a Messi en el borde del área rival. Dentro de las estrategias ofensivas estaba penetrar el bloque de jugadores defendiendo, con un pase o varios pases consecutivos para ganar profundidad.

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Ya desplegado en ataque, Barcelona se encontró con un Granada que defendía en bloque bajo en 1-4-4-2. Era necesario abrir esa defensa, por lo que Koeman necesitó de la amplitud de los laterales ubicados a la altura de los delanteros para abrir esas líneas de oposición. Además, Messi comenzó a cumplir funciones de organización en un rol que exprimió sus mejores ideas y las más conocidas como buscar a Jordi Alba, sorprender con un pase entre líneas, su preciso pase largo. regatear y dera rivales, y su remate de zurda.

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EL FACTOR MESSI

Con Granada replegado y dejando pocos espacios entre líneas, la figura de Messi podía quedar desactivada y sin espacios para recibir el balón. Ante esto, el capitán del equipo del Barza tuvo que retroceder para entrar en contacto con la pelota y participar más del juego. En el primer tiempo, el argentino tuvo la tendencia de moverse cerca de Busquets para perfilarse y tener una visión amplia del campo para repartir pases.

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Messi no solo se movió por el carril central. Su búsqueda de siempre estar perfilado para su zurda y zona de finalización llevó a jugar en el lado derecho para encontrar a Sergi Roberto y poder genera 2 vs. 1 contra el lateral rival o triangular para encontrar a Trincao como el jugador libre. Además, Lionel sacó a relucir su visión de juego para encontrar líneas de pase o habilitar con pases aéreos a Jordi Alba llegando por izquierda o a Griezmann en el área.

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El partido de Messi en números fue impresionante de inicio a fin. A sus 33 años todavía se pone al hombro el funcionamiento del Barcelona y ayer dejó 7 remates a puerta, una asistencia, 9 regates, creó 9 ocasiones de gol, dio 10 pases claves y 162 toques de balón, y cometió una falta. Pisó muy poco el área y más sus alrededores con la intención de ser el hombre que de el último pase para profundizar. Definido también como ‘playmaker’ en su rol.

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LOS GOLES

El gol de Kennedy en el primer tiempo golpeó al Barcelona. Hasta el entretiempo, el conjunto visitante dominaba en el encuentro. El indicador de posesión era de 74% a su favor con 13 remates y seis directos frente a solo uno del equipo que abrió el marcador. El tanto fue producto de un mal despeje de Umtiti. Comenzando la segunda mitad, Roberto Soldado llegó solo frente a Ter Stegen luego de un balón largo, en donde se logró desmarcarse del mismo Umtiti para llegar a gol.

Pese al resultado en contra, los de Koeman no negociaron su intención y continuaron siendo protagonistas. Los remates siguieron llegando desde fuera del área o dentro. El Barza profundizó a través del 2 vs. 1 por los costados o regates de Messi, que incluso tuvo cuatro remates al poste. Aaron Escandell fue la figura por diferencia en el Granada. El arquero español realizó 14 atajadas, pero no evitó que el Barza tenga una remontada memorable en la Copa del Rey.

La participación de Messi en los goles para empatar el partido nació desde el costado derecho, donde el ‘10’ se recostó para mejorar su visión del campo, perfilarse y ver a un compañero llegando por el sector opuesto. Lio atrae la atención del equipo rival y permite que otros jugadores sorprendan: Griezmann aprovechó esta situación en dos oportunidades atacando el espacio y conectando los envíos del capitán al área: un gol y una asistencia.

 

 

A los 88 minutos, Messi se desplazó de afuera hacia dentro en su habitual movimiento para sacarse rivales en conducción y luego jugar hacia el lado contrario. Griezmann leyó su intención y atacó el espacio libre. El exdelantero del Atlético de Madrid llegó a la zona y remató rápido para anotar con ayuda de Escandell, que no logró despegar la pelota y la mandó en su propio arco.

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El 2-2 en los descuentos repitió este patrón. Messi y se desplazó desde la derecha, se perfiló para su zurda y desde el carril interior derecho vio a Griezmann y Alba atacando el área en el otro sector. El intercambio de posiciones es evidente: el balón llegó para el galo que conectó, centró en primera intención y encontró al lateral izquierdo ocupando el área para cabecear y anotar empate.

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El alargue sería igual de emocionante. Griezmann al minuto 100 recibió de Alba y puso el 2-3 del Barza en el encuentro, pero Fede Vico se encontró con un penal y le devolvió la igualdad al juego para Granada. De Jong y Alba marcaron a los 108 y 113 minutos para un 3-5 motivador en un equipo que viene recibiendo comentarios negativos por la situación administrativa del club y para su máxima figura. Esto podría significar un punto de quiebre para uno de los clubes grandes de Europa y sus chances de competir en liga, Copa del Rey y Champions League.