En su día, los 5 padres cracks que heredaron el don del fútbol a sus talentosos hijos

En el Día del Padre, hacemos un recordatorio de aquellos progenitores que heredaron a sus hijos el talento del fútbol. Desde compartir una misma posición, hasta ser antagonistas en el campo de juego. Zinedine Zidane, Patrick Kluivert o Diego Simeone, son algunos de los futbolistas que cultivaron el amor por el balón a sus hijos.

Y pues, como dice el dicho “lo que se hereda no se hurta”, estos cinco casos son claros ejemplos que la pasión, y el don, se llevan en la sangre. Transmitidos desde el mismo momento de sus nacimientos, los siguientes futbolistas siempre fueron llevados a las canchas por sus padres, inoculando así el amor por el deporte más bello del mundo.

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Patrick y Justin Kluivert

Empezando su carrera en el año 1991, el delantero Patrick Kluivert mostró su fútbol en clubes como FC Barcelona, Milan, Newcastle, Valencia y PSV. También poniéndose la camiseta de su país, esa misma pasión que empleó en los campos de juego la usó para enseñarle a su hijo el amor por el fútbol.

Habiendo disputado algunos encuentros con su selección nacional, el atacante Justin Kluivert es un proyecto importante para el Leipzig. Jugando también en el Ajax y en la Roma, el hijo de Patrick espera hacer una carrera tan fructífera como la de su padre.

Johan y Jordi Cruyff

Ícono del fútbol mundial, Johan Cruyff está en el top de los mejores jugadores en la historia del balompié. Su talento hizo delirar a los fanáticos del FC Barcelona y a los de la Selección de los Países Bajos.

Así pues, esta pasión desbordante por la pelota se la heredó a su hijo Jordi Cruyff. Habiendo tenido una decente carrera como futbolista. Con cuatro años en el Manchester United y tres en el Alavés, decidió, al igual que su padre, continuar su carrera también como entrenador.

Alf y Erling Haaland

Alf Haaland paseó su fútbol por casi toda Noruega e incluso llegó al Manchester City. De una carrera modesta, siempre estuvo presente en la vida de su hijo Erling e incluso lo llevó a partidos de fútbol en la Premier League.

Sobrepasando al padre en talento, Erling Haaland es la joya que desea todo el mundo. Delantero de un carácter imponente, anota tanto como ríe y sus goles crean noticias que se tienen que actualizar todo el tiempo. Quizá uno de los pocos ejemplos en los que el hijo superó al padre.

Zinedine y Luca Zidane

Catalogado como el mejor jugador francés en la historia del fútbol, Zinedine Zidane mostró su fútbol en su nación y alcanzó su pico máximo en el Real Madrid. Campeón del Mundo, se dedicó a ser entrenador tras su retiro.

Antagónica ubicación, su hijo Luca Zidane también heredó la pasión por el fútbol, pero prefirió evitar goles que hacerlos. Iniciando su carrera profesional en el Real Madrid, el guardameta defiende en la actualidad la portería del Rayo Vallecano.

Diego y Giovanni Simeone

Diego Simeone fue un gran futbolista, pero es un mejor entrenador. Con la convicción de pelear siempre cada balón como si fuera el último, esa determinación lo llevó a lo mejor del fútbol mundial. Ídolo eterno del Atlético de Madrid, el líder argentino también supo inculcar la pasión del balón a su hijo.

Debutando en River Plate, Giovanni Simeone ha tenido una carrera vertiginosa. Defendiendo actualmente la camiseta del Cagliari, el delantero también está ganándose un espacio en la ofensiva de Argentina.