Jean Deza de cumpleaños: sus inicios en MSK Zilina, su brillo en Montpellier y su presente en Carlos Stein
Por: Aldo Cadillo / andre.cadillo@nixlat.com
Twitter: @aldo_cadillo
Jean Deza ha vestido la camiseta de once clubes diferentes en diez años como profesional. Sí, 10. Quizá el número más potente en el fútbol, pues llevarlo en el dorsal solo está reservado para aquellos habilidosos del balón, los que tienen una técnica depurada, maestros del amague y del vértigo, y ‘Dezita’ era uno de ellos. Y hoy, en el día de su cumpleaños 28 repasamos la trayectoria de un niño que creció sabiendo que iba a ser futbolista.
La carrera futbolistica de Jean Deza inició en la Academia Cantolao del Callao. Por su calidad y talento pronto tomaría aires internacionales. Separado de su familia, viajó hasta Argentina para entrenar durante un año con Lanús y Boca Juniors. Lejos de casa, y quizá pasando por escenas difíciles de sobrellevar para un joven menor de edad, Jean Deza volvió al Perú. Siendo la casa solo una escala, otra vez viajó al extranjero para entrenar. Su talento lo llevó hasta Alemania para estar en las filas del FC Freiburg. Ahí estuvo dos meses y luego volvió para guardar silencio en el Callao.
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De un futuro brillante, decidió arreglar con el MSK Zilina y debutó con 18 años en la Liga de Eslovaquia. Durante su temporada inicial ganó la Superliga y la Copa, dos de sus primeros, y únicos, palmares en su carrera deportiva. Sin saber aún la razón exacta, pero pudiendo deducirla, Jean Deza el siguiente año solo alternó un par de veces con el Zilina y para marzo del 2013 firmó con la Universidad San Martín.
Acostumbrados a realizar muy buenos fichajes, la Universidad San Martín lo cedió al Montpellier HSC, debutando en septiembre del 2013. Tras buenas actuaciones fue convocado a la Selección Peruana y el Montpellier HSC, haciendo válida la opción de compra, lo adquirió hasta junior del 2017. La carrera de Jean Deza iba en ascenso.
Primeros tropiezos
La temporada siguiente se lesiona y no logra ocupar un lugar en el cuadro principal. Luego, en verano del 2015 decidió quedarse en Lima y el Montpellier HSC lo declaró transferible. Alianza Lima lo adquirió en calidad de préstamo por seis meses. Debutando en febrero, Jean Deza ganó notoriedad por su calidad, pero sus movimientos fuera del campo de juego lo dejaron apartado del primer equipo. Quedándose solamente hasta julio, Alianza Lima decide terminar el vínculo y Jean Deza regresó a Francia. Teniendo un alto nivel en los meses posteriores, en mayo del 2016, y aún quedándole un año de contrato, el Montpellier y Jean Deza decidieron terminar el acuerdo laboral.
Es ahí cuando apareció el Levski Sofia de Bulgaria. El cuadro europeo fichó a Jean Deza y tras solo marcar un gol, llegó a Lima para las vacaciones de fin de año. Era el 2016 y Jean Deza decidió extender el reposo ausentándose un mes en los entrenamientos. El plantel búlgaro lo demandó ante la FIFA y tras situaciones no esclarecidas firma por Sport Rosario, aunque no pudo debutar por la sanción FIFA que arrastraba.
Regreso a Perú
En 2018 fichó por Sport Huancayo en donde anotó un gol y jugó dos partidos. En 2019 es contratado por UTC como parte de los refuerzos para disputar la Copa Sudamericana: jugó dos partidos y no marcó ningún gol.
A fines del 2019 regresó a Alianza Lima y aquí, quizá, sea la temporada que más veces fue captado por una cámara de televisión. Con el verano desarrollándose, Jean Deza salió en los programas de farándula y tras dos indisciplinas, el entrenador Pablo Bengoechea decidió apartarlo. Su futuro no cambió con la llegada de Mario Salas, el técnico chileno no lo tomó en cuenta y el volante fue cesado.
Para la temporada 2020 Deportivo Binacional lo fichó, luego estuvo en Sport Rosario, pero nunca debutó y ahora viste la camiseta de Carlos Stein en la Liga2, aunque ya ha tenido un problema de indisciplina.
De futuro prometedor, Jean Deza ha disputado en total 159 partidos anotando 14 tantos. Sí, 14 goles para un hábil volante que tiene una carrera de diez años en el fútbol profesional. Sabiendo llenar alguna vez los ojos del mítico estratega Carlos Bianchi, durante el Sudamericano Sub20 en Argentina, de ese niño que se iba a entrenar al extranjero solo queda la estela de un hombre que no puede gambetear a las noches de verano.