Carolina Salvatore, comentarista de GOLPERU, nos comparte su análisis sobre el camino de Universitario de Deportes en la obtención de su Título Nacional. Nos brinda muchos detalles y datos sobre el equipo que Jorge Fossati regresó a la gloria.
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Siempre se espera que los equipos denominados “grandes” cumplan buenas campañas y sean asertivos en sus contrataciones. En el caso de Universitario de Deportes, el comienzo de año fue con algunos sobresaltos que tenían que ver con la decisión de encontrar un técnico que cumpla el objetivo de sacarlo campeón y jugadores que estén a la altura de ello.
Tras la renuncia de Carlos Compagnucci en el mes de febrero, la dirigencia de la U salió en busca de un profesional que reflejara la filosofía de juego y el espíritu aguerrido del equipo. Después de la danza de nombres, se dio a conocer a Jorge Fossati como nuevo estratega de los “cremas” quien desde ese mismo momento llegó para implementar cambios, tomar decisiones importantes sobre el grupo y la forma de juego. La primera que muchos recuerdan es la disposición del 11 en campo usando la línea de 3 que sostuvo hasta el último minuto de la temporada, a excepción de circunstancias o momentos de juego muy específicos, ese fue uno de los sellos más importantes del uruguayo.
Universitario debía, además de jugar la Liga 1, disputar la Copa Sudamericana y lo hizo hasta los play-offs de 8vos de final tras quedar en el segundo lugar de su grupo detrás de Goias de Brasil. En esa última chance que tenía para seguir con vida en el torneo internacional, los cremas se enfrentaron ante Corinthians de Brasil, perdieron de visita y local, pero además tuvieron una despedida un tanto accidentada que les costó algunos golpes, sanciones y un mal momento para el preparador físico de Fossati que debió atravesar un proceso por discriminación en Brasil. Un hecho que tristemente opacó lo que había sido una actuación aceptable por parte de la U en un torneo internacional después de algún tiempo.
Una vez fuera, el objetivo estuvo puesto en repuntar la última mitad del año para poder acceder a una final nacional. El ideal era que, tras el Torneo Apertura ganado por Alianza Lima y quien accedería finalmente de manera directa por haber quedado puntero del acumulado, pudiesen ganar el Torneo Clausura y posicionarse en uno de los dos lugares de Tabla Acumulada que daban acceso directo a la final. Y así lo consiguieron después de algunos sobresaltos.
Después de haber quedado en tercer lugar en el Torneo Apertura, detrás de Cristal y del líder, Alianza Lima, quien le sacó 8 puntos de diferencia. Ganó el Torneo Clausura en la última fecha con 39 puntos, solo uno sobre Melgar, quien conservó las chances hasta el final dependiendo de otros resultados. Los dirigidos por Jorge Fossati jugaron 18 partidos, ganaron 11, empataron 6 y perdieron solo 1. Pero además tuvieron una diferencia de goles muy positiva: 28 a favor, solo 8 en contra, lo que da un total de +20 en el promedio general.
Estos resultados no solo le permitieron llevarse el Torneo Clausura; también le dieron la chance de disputar la Copa Libertadores 2024 en una posibilidad histórica de pelear ambos frentes, el local e internacional, en el año de su aniversario número 100.
El resumen para Universitario de este 2023 fue muy bueno, aun sin haber podido avanzar más en el torneo internacional, consigue repuntar sobre el final del año y ganar el Torneo Clausura para luego apoderarse del Título Nacional ante su siempre histórico rival Alianza Lima y encima hacerlo en Matute. Título que termina ganando en calidad de visitante, en una celebración que se vio opacada y que recorrió el mundo tras el “apagón” intencional ejecutado por parte de la dirigencia del equipo de La Victoria para que los cremas no sean coronados en su estadio.
A la buena campaña, y la designación de Jorge Fossati como uno de los máximos aciertos por parte de los dirigentes de la U, se le suma el rendimiento de los jugadores locales e internacionales. De un 11 base, Jorge Fossati siempre tuvo alternativas de cambio que estuvieron a la altura de las circunstancias. William Riveros, Rodrigo Ureña y Matías Di Benedetto como extranjeros que entendieron la mística crema desde el comienzo; Aldo Corzo y su entrega, Piero Quispe con su explosión sobre el fin de año y de la mano con la convocatoria a la Selección Nacional y así podríamos seguir nombrando uno por uno a sus intérpretes.
Universitario de Deportes cerró el año con la valla muy alta. Este 2024 es importante por el centenario y por las expectativas que la propia dirigencia se ha puesto, y viniendo de un título nacional no puede aspirar a menos que repetir este cierre de año. Pero sobre todo, los ojos están puestos en lo que pueda hacer en un Torneo Internacional, porque como ya tantas veces se ha hablado, es una cuenta pendiente que no solo persigue al club, sino a todos los equipos peruanos.